Trabajo 1:
Trabajo realizado por el grupo 05, integrado por: José Abaca, Lissete Reyes, Paulina Caro, Marcela Gómez y Pablo Campos.
Trabajo 1:
Prof. Sofía Lemarie San Martín.
Ejemplo 1:
Cuando hemos leído o escuchado un texto o discurso argumentativo, podemos saber si este fue planteado o no eficientemente. Para ello deberíamos responder de manera positiva las siguientes preguntas:
- ¿Conocía bien el tema en discusión?
- ¿Quedaron claras las razones por las cuales defendía una determinada posición?
- ¿Habló pausadamente demostrando seguridad, calma y preparación?
- ¿Conocía los puntos de vista distintos al suyo?
- ¿Fue respetuoso con la postura divergente a la suya?
- ¿Los argumentos presentados te crearon dudas sobre tu propia posición o postura?
Un texto o discurso argumentativo puede tener la siguiente secuencia:
1) Planteamiento del tema o problema.
2) Reseña de las distintas posturas o puntos de vista respecto de él.
3) Planteamiento resumido de nuestra posición (tesis a sustenta).
4) Argumentos que apoyan nuestro punto de vista.
5) Resumen o conclusión.
- Conociendo de antemano los argumentos en contra de tu punto de vista, para que así los puedas rebatir con propiedad.
- Entregando información certera y objetiva.
- No incluyendo datos que resulten difíciles de probar, vagos o dudosos.
- Expresándose (ya sea escrita u oralmente) de una manera simple y clara, utilizando correctamente conectores y ejemplos que apoyen tu postura e ideas.
- Tratando con respeto las ideas ajenas y que tú no compartes.
- Ordenando de manera estructurada, lógica y secuencial las informaciones, planteamientos, puntos de vista, razonamientos.
Formular argumentos sólidos y convincentes para la defensa de lo propuesto. Un texto argumentativo busca persuadir o convencer, es decir, comunicar algo a otra persona con el fin de modificar su comportamiento o su actitud frente a un hecho o una opinión.
La característica central de estos textos es que la intención de quien los escribe o los plantea en forma oral es persuadir a quien lo lee o escucha, respecto de una idea o posición. Cuando notamos que es este el propósito predominante –convencernos de algo a través de argumentos- podemos tener la certeza de que nos encontramos frente a un discurso argumentativo.
Generalmente, este tipo de discurso surge frente a temas problemáticos que admiten diferentes perspectivas para ser tratados. Quien pronuncia o escribe un texto argumentativo manifiesta una postura frente al tema, aceptando, defendiendo o rechazando verdades o creencias de carácter controvertido.